Subdirector de Ventas

Hola a todos, mi nombre es Víctor Adolfo Padua Marín y compartiré mi perspectiva sobre una gestión de cambio exitosa y su relación con la adaptación.

La adaptación para mí es mucho más que simplemente ajustarse a los cambios. Es un proceso continuo de modificación y flexibilidad que abarca aspectos físicos, mentales y sociales. En mi perspectiva, implica dejar atrás las prácticas arraigadas para permitir la evolución constante en nuestros procesos y vida en general. La capacidad de adaptarse es esencial para el progreso, ya que, en un mundo en constante cambio, la rigidez conduce al estancamiento.

En mi rol diario, contribuyo a fomentar la adaptación ajustando mis acciones para resolver los desafíos operativos. Analizo, involucro a los equipos, mejoro la comunicación y proporciono información relevante para respaldar la toma de decisiones.

Sin embargo, a menudo, el mayor desafío radica en motivar a las personas a ser parte del cambio, ya que las costumbres arraigadas y las perspectivas individuales pueden obstaculizar la comprensión de las necesidades de la organización.

Hablando de estructuras, considero que una matriz en nuestra operación diaria agilizará los flujos de trabajo y mejorará la coordinación entre áreas. Las personas que tengan dudas o requieran soporte y se acerquen a la Subdirección de Ventas podrán obtener respuestas más rápidas para sus necesidades.

Poner la formación del alumno en el centro significa para mí enfocar todos los esfuerzos de la organización en el desarrollo académico y profesional del estudiante. Esto implica crear una cultura de trabajo colaborativo que responda a las demandas actuales del mundo académico y laboral, preparando a nuestros estudiantes para una inserción exitosa.

En cuanto a los beneficios de implementar proyectos estratégicos de reorganización, veo eficiencia institucional y un mayor involucramiento de los colaboradores con la organización. La cercanía entre campus y rectoría fortalecerá las relaciones humanas y fomentará sinergias que apunten hacia un objetivo común: el desarrollo de los estudiantes.

Personalmente, la familia es mi pilar. Encuentro en ella satisfacción, felicidad y apoyo emocional. Los momentos compartidos con ellos dan significado a mis esfuerzos en todos los aspectos de mi vida.